En un emocionante partido en Selhurst Park, Joshua Zirkzee y el técnico Ruben Amorim fueron clave en la remontada del Manchester United contra el Crystal Palace. Tras un primer tiempo complicado, en el que el United iba perdiendo por un penal de Jean-Philippe Mateta, las probabilidades de salir victoriosos parecían bajas. Sin embargo, un cambio táctico de Amorim en la segunda mitad, colocando a Bryan Mbeumo en una posición más central, revitalizó al equipo.
Zirkzee consiguió empatar el partido con un gol preciso, rompiendo su sequía de un año en la Premier League. Poco después, Mason Mount selló el 2-1 definitivo. Amorim destacó el aumento de intensidad del equipo y el cansancio del rival como factores decisivos para el cambio. “Dije a los jugadores que necesitábamos estar más activos”, comentó Amorim.
Esta victoria alivió la presión sobre Amorim después de la derrota ante el Everton. El futuro de Zirkzee también está en debate debido a su limitada participación esta temporada, lo que ha generado rumores sobre un posible cambio de equipo antes del Mundial 2026. No obstante, su actuación en este partido fue crucial tanto para su confianza como para la del equipo.
Crystal Palace, bajo la dirección de Oliver Glasner, sufrió otro revés tras su empate en la UEFA Conference League. Glasner expresó su frustración por la falta de profundidad en el equipo y el desgaste acumulado al haber jugado más partidos que sus rivales. Ambos entrenadores buscan reforzar sus equipos en la ventana de transferencias de enero, sabiendo que un impulso podría cambiar el negocio de la temporada. La victoria es solo el segundo triunfo de visitante del United desde marzo, dando más tiempo a Amorim y Zirkzee.
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