Cuando se retiró, Sandberg era el líder en jonrones para segunda base en las Grandes Ligas, con 277 de sus 282 cuadrangulares en esa posición. Fue seleccionado para 10 Juegos de Estrellas a lo largo de su carrera.
Además, Sandberg se destacó al ganar nueve Guantes de Oro, un reflejo de su extraordinaria habilidad defensiva en el campo. También obtuvo siete Bates de Plata, que premian a los mejores bateadores en cada posición.
Su desempeño excepcional lo llevó a ser nombrado Jugador Más Valioso en una ocasión, subrayando su impacto en el juego y su legado duradero en el béisbol.
Sandberg dejó una huella imborrable en el deporte, siendo recordado como uno de los mejores segunda base en la historia de las Grandes Ligas.
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