La Semana 14 de fútbol universitario mostró el dominio de Ohio State y la confusión en la ACC. Ohio State demostró serenidad al enfrentarse a Michigan, manteniendo su racha invicta y destacándose por su capacidad defensiva, permitiendo solo goles de campo a los Wolverines. Julian Sayin tuvo una actuación destacada, lanzando múltiples pases de touchdown, mientras que Bo Jackson, corredor novato, acumuló 166 yardas. Ohio State, con 12-0, se perfila como favorito para el título, mientras que Georgia y otros equipos tienen cuestiones por resolver.
La ACC vivió una situación caótica con cinco equipos empatados en el segundo lugar. Duke, con el peor récord de los cinco, obtuvo un puesto en el juego por el campeonato debido a criterios de desempate complejos. En la SEC, Alabama y Georgia avanzaron, pese a un empate con otros dos equipos. Esto evidencia los inconvenientes de las divisiones enormes y los sistemas de desempate complicados que trae consigo la realineación de conferencias.
En términos de rankings, Ohio State lidera basado en su récord perfecto, seguido por Indiana. Equipos como Texas A&M y Notre Dame están en posiciones inciertas para el CFP. Texas, aunque fuerte, podría quedar fuera debido a derrotas cruciales. Por otro lado, el legado de Lane Kiffin se está redefiniendo tras su decisión de dejar Ole Miss por LSU, causando conmoción en la conferencia.
Finalmente, varios equipos aseguraron su elegibilidad para los tazones con victorias tardías en la temporada. Penn State y Arkansas State, entre otros, lograron boletos con triunfos dramáticos. Esto subraya la importancia de los juegos de final de temporada y cómo pueden solidificar las posiciones de los equipos en las postemporadas.
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