Alejandro Garnacho podría enfrentar una salida de Manchester United tras un conflicto con el entrenador Ruben Amorim. Luego de ser apartado del equipo y excluido de la gira de pretemporada en EE. UU., se espera que el club acepte una oferta adecuada por él este verano. El precio solicitado ha bajado de £70 millones en enero a cerca de £40 millones. Garnacho ya había tenido una segunda oportunidad en diciembre después de un desacuerdo, pero comentarios posteriores tras ser excluido de la final de la Europa League agotaron la paciencia de Amorim.
El talento de Garnacho no está en duda, pero Amorim busca cambiar la cultura en Old Trafford. Al igual que Marcus Rashford, quien fue enviado a Barcelona, Garnacho parece no encajar en los planes del entrenador. Aunque jugadores como Chelsea, Aston Villa, Napoli y Bayern Munich han mostrado interés, aún no hay ofertas concretas. United busca facilidades en la transferencia, quizás con una cláusula de reventa como protección.
Garnacho se siente frustrado con la situación, ya que considera que ha trabajado para adaptarse a las exigencias tácticas de Amorim, a pesar de no jugar en su posición favorita. Aunque tuvo elogios del entrenador en enero, la relación se ha deteriorado. Un detalle que no sentó bien con los aficionados fue una foto de Garnacho con una camiseta de Aston Villa, lo que se percibió como una provocación.
Amorim, al llegar a EE. UU. para el inicio de la temporada, busca un nuevo comienzo para el equipo. Mientras tanto, Garnacho permanece entrenando en Carrington, esperando definir su futuro. La salida de Garnacho podría ser una oportunidad para él, desbloqueando su potencial en otro club, aunque dejaría un vacío en la academia del Manchester United.
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