Manchester United busca redimirse tras su peor temporada en más de 50 años, y el entrenador portugués, Ruben Amorim, está aprovechando su gira en EE.UU. para iniciar esta recuperación. Con el inicio de su primera campaña completa al mando, algunos jugadores también tienen algo que demostrar. Amorim ya ha prescindido de figuras destacadas como Marcus Rashford, cedido al Barcelona, y Alejandro Garnacho, quien está buscando nuevo equipo.
Mason Mount es uno de los jugadores que más tiene que demostrar. Luego de dos años decepcionantes debido a lesiones que limitaron sus apariciones, el mediocampista enfrenta una temporada crucial. Aunque Amorim aprecia su estilo de juego, Mount enfrentará competencia tras la inversión de más de 130 millones de libras en Matheus Cunha y Bryan Mbeumo. Si recupera su forma de 2021-22 con Chelsea, podría ser fundamental para el equipo, pero otra temporada complicada podría poner en duda su futuro.
Joshua Zirkzee también está bajo presión. El delantero neerlandés, que llegó desde Bologna por 36.5 millones de libras, aún tiene que mostrar su mejor versión en Old Trafford. Frente a expectativas altas y tras superar una lesión de isquiotibiales, necesita demostrar su valor esta temporada. Ya sea como delantero central o en una posición de ataque diferente, sumar más goles será decisivo para asegurar su permanencia en el club.
Por su parte, Luke Shaw y Kobbie Mainoo enfrentan desafíos diferentes. Shaw, quien es un favorito de los entrenadores, debe mantenerse en forma para ser esencial en la defensa de Amorim. Sin embargo, si continúa con problemas físicos, su futuro podría ser incierto. Mainoo, un prometedor mediocampista de 20 años, debe encontrar su lugar en el equipo y mostrar que puede competir al más alto nivel, o su situación contractual se volverá un tema preocupante. Además, el arquero André Onana debe corregir sus errores para seguir como el número uno, con el club explorando opciones de refuerzo en esa posición.
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