Desde que Alex Bachman entró en la NFL en 2019, ha enfrentado incertidumbre y rechazos constantes. Nunca ha logrado integrar una plantilla inicial de 53 jugadores y ha sido despedido en cinco ocasiones. Actualmente, a pesar de que los Raiders tienen un récord de 2-13, Bachman ha encontrado más estabilidad que con equipos anteriores como los Rams, Giants, y Texans. Ha sido firmado para el roster activo y juega principalmente como regresador de despejes. Para evitar comprometerse, alquila un coche y vive en una casa de invitados, ya que su posición en la liga es incierta.
Bachman ha pensado en dejar el fútbol, pero su pasión lo mantiene en el juego. “No hay nada que te prepare para la NFL, pero no cambiaría nada,” le comentó a ESPN. Esta dedicación es apoyada por sus padres, quienes han orado por su futuro constantemente. A pesar de las dificultades, su padre, Dave, admite que Alex ha superado muchos obstáculos desde el principio, como su tiempo en la escuela secundaria donde tuvo que demostrar que podía ser receptor y no solo jugar en la defensa.
Durante su tiempo en Wake Forest, Bachman logró destacarse y recibió una beca gracias a su esfuerzo. Acumuló 82 recepciones para 1,182 yardas y 10 touchdowns en 32 juegos. Aunque sus padres no podían seguir financiando su entrenamiento para la NFL, Bachman trabajó como conductor de Uber para costear sus gastos. En el pro day de 2019, logró llamar la atención de los equipos al correr 40 yardas en 4.40 segundos.
El camino de Bachman en la NFL ha sido complicado. Firmó inicialmente con los Rams, pero luego fue parte de la escuadra de práctica de los Giants. Aunque ha tenido momentos difíciles, como ser cortado justo antes del inicio de temporada, sigue luchando por su lugar. Ha jugado en 10 juegos y acumulado 94 yardas en 15 devoluciones de despejes con los Raiders. La dedicación de Bachman y su habilidad para enfrentar la adversidad lo mantienen en el campo, mientras vive con la esperanza de asegurarse un lugar permanente.
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