Adam Peaty dio positivo por COVID-19 en los Juegos Olímpicos de París el lunes, según informó el Comité Olímpico Británico. Esto ocurrió menos de 24 horas después de haber sido derrotado por solo 0.02 segundos en la final de los 100 metros braza, en la que buscaba igualar el récord de Michael Phelps de ganar la misma prueba de natación en tres Juegos Olímpicos consecutivos. Peaty se despertó el domingo con dolor de garganta, lo que posiblemente afectó su rendimiento.
A pesar de no haber ganado el oro, Peaty compartió la medalla de plata con Nic Fink de Estados Unidos, tras ser vencido por el italiano Nicolo Martinenghi. El nadador de 29 años no tiene que aislarse de otros atletas ni debe dar negativo en una prueba de COVID-19 antes de competir nuevamente, aunque evitará el contacto cercano durante los próximos días. El equipo británico y Peaty confían en que podrá participar en las pruebas de relevos que aún quedan en el programa de natación.
Peaty expresó que no utilizaría una posible enfermedad como excusa para su desempeño y mostró su felicidad por Martinenghi. Tras la carrera del domingo, agradeció a su pareja y entrenador en Instagram, destacando que su segundo lugar era una “bendición”. “Estos últimos 14 meses han sido increíblemente difíciles y no me arrepiento de ninguna sesión de entrenamiento o decisión que tomé”, escribió. Añadió que estaba orgulloso del hombre y el atleta en el que se había convertido.
Peaty, quien regresó a las competencias en febrero después de una pausa para cuidar su salud mental, describió su medalla de plata como una victoria personal. “En mi corazón, he ganado y estas son lágrimas de felicidad porque dije que daría lo mejor de mí cada día, y lo he hecho”, comentó Peaty. Con este logro, ahora suma seis medallas olímpicas, incluidas tres en relevos entre Río 2016 y Tokio 2020.
Source link


