Australia sorprendió en la primera fecha del Rugby Championship 2025 al vencer a Sudáfrica, el campeón vigente, en el Ellis Park de Johannesburgo. James O’Connor, de 35 años, fue uno de los responsables clave en el campo. Su inclusión como apertura generó controversia en su país y hasta él mismo sintió incertidumbre por su papel.
O’Connor compartió sus pensamientos sobre el partido, confesando sus dudas: “Cuando Joe Schmidt me asignó el papel de 10, estaba emocionado y dispuesto, pero también tenía una voz interna que cuestionaba si podría con los Springboks”. Esta honestidad refleja el desafío personal que enfrentó antes del juego.
En una conferencia de prensa, expresó: “Siento como si hubiera vivido tres o cuatro vidas en el rugby, y cada una tiene su partido favorito. Este fue especial porque incluso yo dudaba de mi capacidad”. O’Connor admitió sus momentos de incertidumbre al llegar a la concentración.
Reconoció: “Pensé si estaba superando mis límites. El ritmo de mis compañeros era intenso, y yo trabajaba poco a poco”. Este año, había estado en el banco finalizando los partidos, un rol que se fue solidificando con el tiempo bajo diferentes entrenadores.
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