El 8 de agosto de 2025, los New England Patriots revelaron una estatua de bronce de 12 pies de Tom Brady frente al estadio Gillette. Esta estatua marca el cumplimiento de una promesa hecha por el propietario Robert Kraft, cuando el famoso quarterback fue incluido en el Salón de la Fama del equipo el año pasado. La elección del tamaño no fue accidental, ya que coincide con el número de camiseta de Brady, el 12, durante sus 20 años de carrera con los Patriots, donde ganó seis campeonatos de Super Bowl.
Durante la ceremonia, Brady expresó su sorpresa y honor, recurriendo al humor en varias ocasiones. Comentó que usualmente no se construyen estatuas hasta que uno es “realmente viejo”, bromeando sobre compañeros como Mike Vrabel y Tedy Bruschi. Vrabel, quien compartió equipo con Brady de 2001 a 2008 y ahora es el entrenador de los Patriots, asistió al evento y presenció cómo se descubría esta figura que inmortaliza la leyenda de Brady frente al Salón de la Fama de los Patriots.
Brady recordó sus inicios cuando fue elegido en la sexta ronda del draft de 2000, sin imaginar que terminaría convertido en bronce 25 años después. También hizo bromas sobre su físico, diciendo que por primera vez los periodistas de Boston lo describirían como “esculpido”. La revelación de la estatua se había planeado para la temporada anterior, pero se pospuso hasta 2025 para coincidir con la apertura de la pretemporada contra los Washington Commanders.
Kraft también destacó los detalles únicos de la estatua, creada por un escultor local admirador de los Patriots, y montada sobre una base de granito de Vermont. La estructura total mide 17 pies, simbolizando los títulos de la AFC Este ganados por Brady. En su discurso, Brady hizo otra broma diciendo que la estatua no solo es para los fans de los Patriots, sino también para que los aficionados de los Jets le tiren cerveza. Finalmente, la multitud coreó “¡Brady! ¡Brady! ¡Brady!” durante la ceremonia llena de emociones.
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