En la NBA, los equipos deben acertar en intercambios, contrataciones y elecciones del draft para competir por el título. Sin embargo, algunas transacciones resultan en errores significativos. Por ejemplo, desde 2020, Cleveland cometió un error al no extender la oferta calificativa a Isaiah Hartenstein, quien luego prosperó en otros equipos como los LA Clippers. Otro caso es Indiana, que contrató a Nate Bjorkgren como entrenador, solo para despedirlo tras un año debido a problemas con los veteranos del equipo.
Por otro lado, los Knicks firmaron a Evan Fournier por cuatro años y $73 millones en 2021, solo para verlo abandonar la NBA antes de que concluyera su contrato. Portland cometió un error similar al renovar a Jerami Grant justo cuando Damian Lillard pedía un intercambio, una decisión que no encajó en su roster en reconstrucción. Utah también falló al no intercambiar a Lauri Markkanen cuando su valor era alto.
En una escala mayor, los Clippers no desarrollaron talento joven, lo que ha impedido que el equipo encuentre el éxito a largo plazo junto a Kawhi Leonard y Paul George. Además, el Thunder y los Celtics regalaron futuras estrellas como Desmond Bane y Alperen Sengun en transacciones imprudentes. Mientras que Houston tomó a Jalen Green sobre Evan Mobley en el draft de 2021, una decisión que podría haber cambiado el rumbo defensivo del equipo bajo Ime Udoka.
Finalmente, algunos intercambios alteraron significativamente franjas enteras de equipos. Milwaukee adquirió a Damian Lillard pensando que mejoraría su ofensiva junto a Giannis Antetokounmpo, pero resultó ser un desastre. En la cima de la lista está Dallas, que conmocionó a todos al intercambiar a Luka Doncic en 2025, un error que trascendió lo deportivo y provocó una revuelta masiva de los fanáticos.
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