Los Hoosiers de Indiana están en una racha histórica esta temporada de fútbol universitario. Han conseguido un récord de 13-0 en la temporada regular y se posicionan como el único equipo invicto que avanza a los playoffs del college football. Además, Fernando Mendoza, su mariscal de campo, se ha convertido en el primer Hoosier en ganar el Trofeo Heisman después de una impresionante actuación. Este éxito reciente se suma al legado deportivo de Indiana, mientras se preparan para enfrentar a Alabama en el Rose Bowl.
A lo largo de la historia, Indiana ha tenido momentos memorables en el deporte. En 1954, Milan High School ganó el campeonato estatal de baloncesto con un tiro de último momento de Bobby Plump. En fútbol americano, los Hoosiers alcanzaron el Rose Bowl en 1968 bajo el mando del entrenador John Pont. El equipo de baloncesto masculino de Indiana, entrenado por Bob Knight, logró una temporada perfecta en 1976.
En otros deportes, los Indiana Pacers ganaron su tercer campeonato de la ABA en 1973. Janet Guthrie rompió barreras al ser la primera mujer en calificar para las 500 Millas de Indianápolis en 1977. En 1979, el enfrentamiento entre Larry Bird y Magic Johnson en el campeonato de la NCAA elevó el interés en el baloncesto universitario. Los Colts de Indianápolis ganaron su primer Super Bowl en 2007 liderados por Peyton Manning.
Más recientemente, el béisbol de los Hoosiers logró su primera participación en la Serie Mundial Universitaria en 2013. En el baloncesto femenino, Arike Ogunbowale llevó a Notre Dame al título nacional en 2018. En el ámbito del atletismo, Cole Hocker sorprendió al establecer un récord olímpico en 2024. La llegada de Caitlin Clark a los Indiana Fever en el draft de la WNBA de 2024, ha revitalizado el interés por el baloncesto femenino en el estado.
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