La Selección Masculina de Baloncesto Pierde contra Canadá y Queda Fuera de los Juegos Olímpicos

El equipo de Sergio Scariolo necesitaba una victoria para avanzar a los cuartos de final y fue Darío Brizuela, con 17 puntos, quien demostró el carácter de un conjunto curtido en mil batallas. En un partido muy disputado, la selección española se mantuvo en la pelea hasta el último cuarto, a pesar de estar 14 puntos abajo. Sin embargo, un triple de RJ Barrett y algunos tiros libres fallidos marcaron el fin del camino para España y el adiós de Rudy Fernández.

España no dejó nada al azar y sabía que ganar era la única opción después de la claridad mostrada por Grecia en el turno anterior. Los chicos de Scariolo afrontaron un duelo de todo o nada contra un rival con menos presión, pero la calidad de Canadá fue alejando la posibilidad de victoria. En la primera mitad, el equipo europeo no encontró su mejor versión, especialmente notándose un pobre rendimiento en los triples, con solo 3 de 19. Al descanso, España se fue con una desventaja de 11 puntos (47-36).

La selección española intentaba mantener el marcador ajustado desde el primer cuarto, enfrentándose a una sólida defensa canadiense. Aunque lograron ponerse brevemente por delante gracias a los triples de Abrines y algunos chispazos defensivos, el equipo americano rápidamente retomó la delantera. La rotación fue mejor para los europeos, pero España no aprovechó los rebotes ni logró contrarrestar la fortaleza defensiva de Canadá, liderada por Shai Gilgeous-Alexander y otros anotadores compartidos.

En la segunda mitad, España corrigió sus carencias defensivas, pero seguía fallando en ataque. Brizuela aportó la chispa necesaria, con Canadá alejándose por 14 puntos. Aunque España logró acercarse gracias a triples de Abrines y Juancho, la presión sobre el marcador fue constante. En momentos críticos, Nembhard y la defensa canadiense se impusieron, culminando en un decisivo triple de Barrett. Pese a la lucha y el carácter mostrado por los de Scariolo, España se despidió del torneo y, simbólicamente, de Rudy Fernández, cerrando su paso por el ‘grupo de la muerte’.

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