La delegación ecuestre mexicana ha captado la atención en los Juegos Olímpicos de París 2024, gracias a los impresionantes logros de tres jinetes que llevan apellidos icónicos: Carlos Hank Guerreiro, Eugenio Garza Pérez y Andrés Azcárraga. Estos nombres no solo son reconocidos por sus habilidades deportivas, sino también por sus influyentes familias en México.
Carlos Hank Guerreiro es hijo de Carlos Hank González, quien es presidente del Grupo Financiero Banorte, consejero de GRUMA y director de Grupo Hermes. Desde joven, Carlos mostró talento en la equitación, perfeccionándose en los Estados Unidos y logrando importantes triunfos como la medalla de oro en el Campeonato Norteamericano de Jóvenes Jinetes y el Gran Premio Sub-25 de Palm Beach. A sus 25 años, ocupa el puesto 13 en el ranking mundial.
Eugenio Garza Pérez, bisnieto del fundador del Tecnológico de Monterrey y Grupo VISA, Eugenio Garza Sada, tiene 28 años y una envidiable trayectoria. Entre sus logros destaca una medalla de plata en los Juegos Panamericanos, lo que subraya su talento en la equitación.
Andrés Azcárraga, parte del legado de Emilio Azcárraga, dueño de Televisa, también se ha destacado en estas olimpiadas. Todos ellos lograron clasificar para la final por equipos, pero finalmente no compitieron. El Comité Olímpico Mexicano explicó que la salud de los caballos es prioritaria, y por ello, decidieron no participar en la final para asegurar el bienestar de los animales.
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