Bryce Young y C.J. Stroud, amigos desde la infancia, mantienen una conexión que jamás se debilitará. Este verano, se reencontraron en un evento en Nueva York. Durante una práctica conjunta calurosa entre los Houston Texans y los Carolina Panthers, Stroud corrió de un lado a otro y luego se acercó a Young y su familia, quienes conversaban bajo una carpa de sombra junto a la madre y hermano de Stroud. Desde rivales juveniles en California hasta competir en básquet y fútbol, su relación va más allá del profesionalismo.
La amistad entre ellos no se trata de competir. A pesar de sus diferentes comienzos en la NFL, ambos se apoyan mutuamente. El año pasado, Stroud llevó a los Texans a los playoffs, mientras Young, tras un mal inicio, terminó fuerte con los Panthers. Durante estos momentos, las familias de ambos también estrecharon lazos, con sus madres hablando casi semanalmente. “Siempre nos apoyamos, sin intentar superarnos mutuamente”, comentó Young.
Se conocieron jugando al básquet en Los Ángeles y, a pesar de sus diferentes decisiones en deportes, mantienen una camaradería. Bryce Young recuerda claramente un juego de 2015 donde destacó en el campo de fútbol, lanzando pases que llevaron al equipo a la victoria. Aunque Stroud enfrentó dificultades en ese partido, Young siempre vio a su amigo como un líder fuerte y de fe.
La relación entre sus familias ayuda a que, aunque los medios comparen sus carreras, ellos se sigan apoyando. Ambas familias entienden el desafío de llegar a donde están y reconocen el escrutinio al que están sometidos. Cuando los Texans y Panthers se enfrenten nuevamente, la historia sobre quién es el mejor quarterback continuará, pero con un enfoque en una competencia sana y un sueño compartido.
Source link
