Kobbie Mainoo se encuentra en un momento complicado en su carrera con el Manchester United. A pesar de ser conocido por su calma, decidió solicitar un préstamo al club debido a la falta de tiempo en el campo, lo que podría afectar su lugar en el Mundial del próximo año. Desde la llegada de Ruben Amorim, Mainoo ha iniciado solo 12 de los 30 partidos de la Premier League, y su ausencia en la última convocatoria de Inglaterra recalca su situación.
El ascenso de Mainoo fue meteórico. Desde su debut a los 17 años, rápidamente se consolidó como pieza clave del equipo y fue convocado a la selección inglesa para la Eurocopa 2024. Con goles memorables ante equipos como Wolves y Liverpool, su potencial parecía asegurarle un futuro brillante. Sin embargo, las recientes decisiones tácticas de Amorim y la falta de minutos han puesto en duda su continuidad.
El sistema 3-4-3 de Amorim no ha favorecido a Mainoo, quien ha sido probado en múltiples posiciones sin llegar a establecerse. Esto, sumado a las preocupaciones surgidas en enero, lo llevaron a considerar un préstamo que el United rechazó. La posibilidad de un traslado temporal a Napoli podría revivirse en enero si la situación persiste, pero primero el club necesitaría encontrar un reemplazo adecuado.
La incertidumbre también afecta el legado de la academia del United. Desde 1937, siempre ha habido un graduado en la plantilla del primer equipo. La posible salida de Mainoo podría poner fin a esta histórica racha, generando cuestionamientos sobre las políticas del club y el impacto de las normas de “Profit & Sustainability” que incentivan la venta de jugadores formados en casa. Si Mainoo se va, podría llevarse consigo un trozo de la historia del Manchester United.
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