El equipo de fútbol femenino de Estados Unidos llega a los cuartos de final de los Juegos Olímpicos de 2024 con un desempeño sobresaliente en la fase de grupos, ganando todos sus partidos bajo la nueva dirección de Emma Hayes. Enfrentarán a Japón el sábado en un partido esperado. Tras una decepcionante actuación el año pasado en la Copa Mundial, el equipo ha mostrado un progreso notable, generando expectativas sobre si podrán asegurar una medalla este verano.
El cambio más significativo bajo la dirección de Hayes, según Sam Borden, ha sido un estilo de juego más controlado y menos apresurado. La inclusión de Mallory Swanson en lugar de Alex Morgan ha revitalizado la línea delantera. Jeff Kassouf añade que Hayes ha logrado increibles mejoras en confianza y dirección, transformando al equipo tácticamente para ser más flexible en comparación con el año pasado.
Sophia Smith ha sido la jugadora que más ha impresionado, adaptándose a un papel más agresivo con la selección nacional. Por otro lado, Rose Lavelle no ha mostrado su mejor rendimiento debido a una gestión cuidadosa de sus minutos. Trinity Rodman también ha destacado, siendo constante en su desempeño desde el inicio de 2023, y Naomi Girma ha sido crucial en la defensa.
La clave para vencer a Japón será mantener una defensa sólida, especialmente sin Coffey y Davidson. Estados Unidos deberá estar preparado para el juego de transición en el que Japón podría sorprender. Sam Borden y Jeff Kassouf coinciden en que estos Juegos Olímpicos serán un desafío, pero confían en el potencial del equipo para competir por el oro, aunque reconocen que obtener cualquier medalla ya sería un logro significativo tras el traspié en la Copa Mundial de 2023.
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