El Comité Olímpico Canadiense (COC) suspendió a la entrenadora Bev Priestman de la selección de fútbol femenino tras recibir información de que ella estaba probablemente al tanto del uso de drones para espiar en las sesiones de entrenamiento de Nueva Zelanda antes de su enfrentamiento en los Juegos Olímpicos de París 2024. Las quejas de Nueva Zelanda señalaron que Canadá había utilizado drones durante dos de sus entrenamientos, lo que llevó a esta polémica decisión. Andy Spence asumirá el cargo de entrenador durante el resto del torneo.
El CEO de Canadá Soccer, Kevin Blue, declaró que no se ha considerado la posibilidad de retirar al equipo del torneo, argumentando que la situación se ha abordado de manera rápida y significativa. Blue también confirmó el intento de uso de drones por parte del equipo masculino durante la reciente Copa América en Estados Unidos, aunque el entrenador Jesse Marsch rechazó esta práctica una vez se enteró.
Informes mediáticos sugieren que el uso de drones por el equipo femenino de Canadá no es nuevo, mencionando incidentes similares en los Juegos Olímpicos de Tokio. El CEO del COC, David Shoemaker, señaló que esta revelación le hizo sentir mal, pues cuestiona la integridad de la medalla de oro conseguida en Tokio. Shoemaker afirmó que el COC colaborará plenamente con cualquier investigación para llegar al fondo del asunto.
Por su parte, la capitana Christine Sinclair lamentó los actos de espionaje y expresó su apoyo a las investigaciones. Sinclair aseguró que, durante sus 23 años en el equipo nacional, nunca se discutió ni se mostró metraje de drones en reuniones de equipo. Mientras tanto, la FIFA y el Comité Olímpico Internacional están investigando el incidente, y Canadá Soccer realizará una revisión interna para aclarar todos los hechos.
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