David Benavidez defendió con éxito sus títulos de peso semipesado del WBC y WBA al vencer a Anthony Yarde en Riyadh, Arabia Saudita. Esta actuación reafirma su estatus como uno de los mejores boxeadores libra por libra y plantea la pregunta de si será el nuevo rostro del boxeo mexicano, reemplazando a Canelo Álvarez. Benavidez, nacido en Arizona pero de ascendencia mexicana, expresó su deseo de apropiarse de las fechas tradicionales de boxeo mexicanas y planea subir de categoría para enfrentar a Gilberto “Zurdo” Ramírez el próximo Cinco de Mayo.
Devin Haney, conocido por su estilo conservador, ganó el título welter WBO al vencer a Brian Norman Jr. Haney mostró una faceta más agresiva, derribando a Norman en el segundo asalto, aunque no logró finalizar la pelea. Esta victoria lo convierte en campeón de tres divisiones, pero su incapacidad para noquear a sus rivales aún genera críticas. Haney afirmó que está listo para recuperar su posición en el boxeo y busca enfrentamientos significativos para unificar títulos.
Jesse “Bam” Rodríguez unificó títulos de peso mosca júnior al vencer a Fernando Martinez. Aunque ha brillado en las divisiones menores, su talento y emocionante estilo de pelea prometen convertirlo en una gran estrella. Rodríguez busca ser indiscutido antes de subir de categoría, y aunque sus próximos rivales no son de alto perfil, cada pelea suya es imperdible. A sus 26 años, está en el camino de conquistar al público general.
Abdullah Mason, el campeón más joven del boxeo actual, derrotó a Sam Noakes para ganar el título ligero WBO. Mason mostró determinación al vencer a un rival resistente como Noakes. Aunque tiene áreas por mejorar, especialmente en defensa, esta victoria es un paso crucial en su desarrollo. Mason deberá adaptarse a estilos variados en el futuro, pero su juventud y talento auguran un gran potencial en los próximos años.
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