El gobierno de Estados Unidos admitió que las acciones de un controlador aéreo y un piloto de helicóptero del Ejército contribuyeron al accidente del 29 de enero, en el que un avión y un helicóptero Black Hawk colisionaron cerca de Washington, D.C., causando la muerte de 67 personas, incluidos jóvenes talentos del patinaje artístico. Este fue el accidente aéreo más mortal en suelo estadounidense en más de veinte años. Los patinadores y sus familias, que habían asistido al Campeonato Nacional de Patinaje Artístico en Wichita, Kansas, estaban entre los fallecidos.
En documentos judiciales relacionados con una demanda de las familias de las víctimas, se reconoció que el controlador aéreo violó procedimientos de separación visual, y que los pilotos del helicóptero del Ejército no mantuvieron la vigilancia necesaria para evitar la colisión. Sin embargo, también se sugirió que los pilotos del avión y las aerolíneas podrían haber tenido parte de la culpa. Las aerolíneas American Airlines y su socio regional, PSA Airlines, han solicitado la desestimación de las demandas en su contra.
Entre los miembros de la comunidad del patinaje que perdieron la vida estaban seis personas asociadas al Skating Club de Boston, incluidos los adolescentes Jinna Han y Spencer Lane, sus madres y los entrenadores Evgenia Shishkova y Vadim Naumov. En marzo, Boston les rindió homenaje durante los campeonatos mundiales. Tras la colisión con el jet de American Airlines, al menos 28 cuerpos fueron recuperados de las aguas heladas del río Potomac, mientras el avión se dirigía al Aeropuerto Nacional Ronald Reagan.
Robert Clifford, abogado de una de las familias afectadas, declaró que el gobierno admitió la responsabilidad del Ejército y la FAA por el incumplimiento de los procedimientos de control de tráfico aéreo. Las familias continúan lidiando con el profundo dolor causado por esta tragedia. Un portavoz de American Airlines rechazó comentar pero insistió en que el recurso legal adecuado debería dirigirse contra el gobierno de EE.UU. La Junta Nacional de Seguridad en el Transporte publicará su informe sobre el accidente el próximo año, destacando varios factores que contribuyeron al desastre.
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