En una entrevista con Canal 11, Bruno Fernandes expresó su dolor por la disposición del Manchester United a considerarlo transferible durante el verano. Un equipo de la Saudi Pro League, Al Hilal, estaba dispuesto a pagar £100 millones y un salario semanal de £750,000 por él. A pesar de que el club había dejado la decisión en manos de Fernandes, su sentimiento de rechazo fue evidente, interpretando su venta potencial como una falta de valoración por sus contribuciones al equipo.
El Manchester United, enfrentando problemas económicos tras no calificar para competiciones europeas, consideró transferir a Fernandes como una posible solución financiera. La venta del capitán podría haber permitido invertir en nuevos talentos y fortalecer áreas claves del equipo. Sin embargo, Fernandes sintió que el club estaba preparado para dejarlo ir, aunque el entrenador deseaba que se quedara.
Fernandes sigue siendo una pieza clave para United y demostró su valor con un gol impresionante en el empate 4-4 contra Bournemouth. No obstante, se plantea si su salida habría beneficiado al equipo a largo plazo. Clubes como Liverpool han prosperado después de vender a sus estrellas, reinvirtiendo el dinero en jugadores que transformaron el equipo.
A pesar de ser esencial para el equipo, Fernandes no es insustituible. Su traspaso a Al Hilal podría haber permitido la contratación de nuevos talentos que fortalecerían al United. Aunque su permanencia es valorada por los aficionados, Fernandes podría reflexionar sobre por qué el club consideró su salida y enfocarse en el panorama general.
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