Debido a preocupaciones sobre la calidad del agua en el Sena, las autoridades cancelaron por segundo día consecutivo la parte de natación en una sesión de entrenamiento del triatlón olímpico en París. Los organizadores del evento en los Juegos de París siguen optimistas de que los atletas podrán nadar en el conocido río cuando la competencia comience el martes.
La organización World Triathlon, junto con su equipo médico y funcionarios de la ciudad, confían en que el clima soleado y las temperaturas más altas reduzcan los niveles de bacterias a los límites necesarios para llevar a cabo la parte de natación. El Ministerio de Deportes Francés, Amélie Oudéa-Castéra, aseguró que los planes implementados para controlar los niveles de bacterias han sido efectivos, aunque la lluvia reciente ha complicado la situación.
El lunes por la mañana, World Triathlon decidió cancelar el entrenamiento de natación tras una reunión sobre la calidad del agua, vinculada estrechamente con el clima. El ministro Oudéa-Castéra expresó su confianza en que la mejora del clima permitirá la realización del triatlón masculino el martes. Como plan alternativo, los organizadores están preparados para posponer los eventos o convertir el triatlón en un duatlón si los niveles de bacterias siguen elevados.
La natación en el Sena ha estado prohibida durante más de un siglo debido a la mala calidad del agua. Sin embargo, los organizadores han invertido 1.500 millones de dólares en la preparación del río para los Juegos Olímpicos. Entre las medidas para mejorar la calidad del agua están la construcción de un gran depósito para capturar el exceso de agua de lluvia y la renovación de la infraestructura de alcantarillado. La alcaldesa de París, Anne Hidalgo, se bañó públicamente en el río dos semanas antes del inicio de los eventos olímpicos, con la intención de demostrar que el agua es lo suficientemente limpia para las competiciones.
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