Arsenal se encuentra nuevamente en la cima de la Premier League durante Navidad, pero el equipo de Mikel Arteta parece estar perdiendo fuerza. A pesar de ganar 1-0 contra el Everton con un penalti de Viktor Gyökeres, el juego careció de brillantez. Esta victoria y la anterior contra los Wolverhampton Wanderers, con un gol en propia meta en el tiempo de descuento, muestran resiliencia pero también un posible agotamiento.
Hace un mes, Arsenal llevaba una ventaja cómoda en la liga después de vencer 4-1 a Tottenham gracias a un hat trick de Eberechi Eze. Sin embargo, el panorama ha cambiado y la ventaja se ha evaporado. Manchester City, que derrotó fácilmente al West Ham, está pisándole los talones y han recuperado su forma ganadora con Pep Guardiola al mando.
El triunfo contra el Everton es positivo en el sentido de que Arsenal sigue sumando puntos a pesar de sus bajos rendimientos. Sin embargo, el equipo también enfrenta desafíos y sus limitaciones están apareciendo justo cuando City está recuperando su nivel habitual. Aunque ganaron con un penalti, el equipo careció de la fuerza ofensiva que los llevó al éxito anteriormente.
Arteta reconoce la presión, pero enfatiza el control de su propio rendimiento. “No miramos eso”, dijo refiriéndose a la presión de City. “Disfrutad cada día. Haced vuestro mejor esfuerzo y veremos qué logramos”. Mientras tanto, Arsenal se enfrenta a una carrera difícil hacia el título, compitiendo contra un City que ya les ha arrebatado esperanzas en temporadas pasadas. Estar en la cima en Navidad no garantiza nada; deben mantener el ritmo hasta el final de mayo para que cuente.
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