Tras una victoria fácil del equipo de Estados Unidos frente a Brasil en los cuartos de final del baloncesto masculino olímpico, el entrenador Steve Kerr ha subrayado que no se pueden acomodar con el triunfo de 26 puntos contra Serbia en el primer partido de la fase de grupos, ni con la victoria por el mismo margen en Abu Dabi el pasado 17 de julio. Kerr se pregunta si Serbia y Nikola Jokic podrían estar preparando alguna sorpresa para el tercer enfrentamiento entre ambos equipos en menos de un mes, en las semifinales del jueves.
“No podemos confiarnos solo porque ya los hemos vencido dos veces”, dijo Kerr. “Tenemos que estar listos para su mejor esfuerzo. Debemos pensar en qué harán diferente. Jokic podría jugar 40 minutos. ¿Qué tendrán bajo la manga?” Esta preocupación es compartida por los jugadores, entre ellos Joel Embiid, quien probablemente comenzará el partido contra Jokic.
Nikola Jokic ha demostrado ser un adversario formidable para Estados Unidos. Promedia 19.3 puntos, 11.8 rebotes, 7.5 asistencias, 2.5 robos y 1.0 bloqueo por juego, con un 60% de efectividad en tiros. Además, cuando Jokic está en la cancha, Serbia ha superado a sus oponentes por 43 puntos, mientras que al estar en el banco han sido superados por 12 puntos. En el último enfrentamiento contra Estados Unidos, la diferencia en el marcador fue equitativa durante los 31 minutos de Jokic en la cancha, pero significativa en su ausencia.
El experimentado entrenador serbio, Svetislav Pesic, ha utilizado a Jokic en rotaciones inusuales, lo cual ha creado especulaciones sobre su estrategia para el próximo partido. Además, jugadores como Bogdan Bogdanovic han destacado con un promedio de 18.5 puntos por juego y un excelente porcentaje en tiros de tres y tiros libres. A pesar de haber sido derrotados previamente, Serbia ha ganado tres partidos consecutivos, y LeBron James enfatiza la necesidad de enfocarse y estar preparados para el próximo desafío.
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