El mariscal de campo Drake Maye consolidó su candidatura al MVP al llevar a los New England Patriots a una victoria convincente por 33-15 sobre los New York Giants. Maye lanzó para 282 yardas, con dos touchdowns y sin intercepciones, destacándose por su precisión. Este triunfo marca la décima victoria consecutiva de los Patriots, que ahora tienen un récord de 11-2 y se posicionan como los mejores de la NFL antes de su semana de descanso.
Una de las jugadas más impresionantes del partido fue un pase de 33 yardas a Kyle Williams cerca del final del segundo cuarto. Williams, quien estaba en quinto lugar en el orden de receptores, logró un touchdown espectacular, gracias a la precisión de Maye. Este desempeño es la sexta vez en la temporada que Maye completa al menos el 75% de sus pases con dos o más touchdowns, igualando un récord notable en la historia de la NFL.
El juego cambió de rumbo con un golpe crucial del linebacker Christian Elliss al mariscal de campo de los Giants, Jaxson Dart. Esto estableció el tono físico del juego, y la rápida respuesta de los Patriots resultó en un touchdown para una ventaja de 17-0. La gestión durante la semana de descanso por parte del entrenador Mike Vrabel será clave, especialmente para recuperar a jugadores lesionados antes de enfrentar a los Buffalo Bills.
En cuanto a los Giants, sufrieron una derrota dolorosa que podría poner en duda la seguridad del gerente general Joe Schoen después de cambios recientes en el cuerpo técnico. Jaxson Dart, quien regresaba de una conmoción cerebral, tuvo un desempeño mixto y no logró revertir el desastre de la primera mitad. La defensa y equipos especiales de los Giants, en particular, fueron problemáticos, permitiendo jugadas críticas que dejaron al equipo con una desventaja insuperable.
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