El emotivo Matt Campbell fue presentado como el nuevo entrenador de Penn State. Emocionado, habló por primera vez con los medios tras ser elegido después de 58 días de búsqueda. Pat Kraft, el director atlético, expresó su alegría y alivio. La búsqueda fue larga, a pesar de que Campbell parecía el candidato ideal desde el principio por su éxito en Iowa State y su conexión con la tradición de Penn State.
La salida de James Franklin en octubre sacudió el mundo del fútbol universitario. A pesar de recuperar jugadores clave y debutar en el ranking más alto en 28 años, Penn State no cumplió con las expectativas con varias derrotas. Kraft enfatizó en la necesidad de ganar partidos importantes para aspirar a un campeonato nacional, lo que llevó a buscar un nuevo liderazgo.
El mercado de entrenadores era complicado. El interés inicial de Penn State estaba en figuras como Matt Rhule y Curt Cignetti, pero ambos renovaron sus contratos. También se consideraron otros candidatos como Mike Elko, pero la búsqueda continuó sin éxito. Los Nittany Lions necesitaban un entrenador con éxito sostenido, capacidad de reclutamiento y desarrollo de talento.
Finalmente, la atención se centró en Kalani Sitake y Matt Campbell. A pesar de la posibilidad de que Sitake asumiera, BYU renovó su contrato, lo que llevó a Kraft a reevaluar a Campbell. Una llamada final convenció a Kraft de que Campbell era el indicado para llevar a Penn State a la gloria. Con un contrato de ocho años, Campbell asume el mando con la esperanza de llevar al equipo a un campeonato nacional.
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