Dawn Staley, entrenadora del equipo femenino de South Carolina, reveló que habría aceptado ser la entrenadora de los New York Knicks si se lo hubieran ofrecido, tras participar en una entrevista formal para el puesto. En el podcast “Post Moves”, junto a la estrella de la WNBA Aliyah Boston y la exjugadora Candace Parker, Staley expresó su deseo de romper barreras para las mujeres: “Es el maldito New York Knicks. Yo vengo de Philly, pero son los Knicks.”
Sin embargo, los Knicks contrataron a Mike Brown en julio para llenar la vacante de entrenador. Staley, miembro del Salón de la Fama del Baloncesto, dijo que estaba bien preparada para la entrevista, pero que quizá sus preguntas sobre los desafíos de ser la primera mujer entrenadora en la NBA afectaron sus posibilidades. “¿Cómo cambiaría su trabajo diario si me contrataran?”, preguntó, subrayando los retos adicionales que enfrentaría como mujer en una posición históricamente ocupada por hombres.
A pesar de su entusiasmo, Staley sintió un cambio de energía durante el proceso de entrevista, lo que la llevó a reflexionar si sus preguntas inquisitivas pudieron haber jugado en su contra. Aparte de Staley, los Knicks entrevistaron a Taylor Jenkins, James Borrego y Micah Nori antes de decidirse por Brown, quien había dirigido equipos como los Sacramento Kings, Cleveland Cavaliers y Los Angeles Lakers.
Dawn Staley lamentó no haber recibido la oferta, no solo por la oportunidad profesional que representaba, sino por el impacto significativo que tendría al convertirse en la primera mujer en ocupar un cargo tan destacado en la NBA. Para ella, era una cuestión tanto personal como de avance para las mujeres en el deporte.
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