SEATTLE — Sam Darnold resumió bien la situación cuando se paró en el podio dentro del Lumen Field el jueves por la noche. La celebración en el vestuario de los Seahawks apenas se estaba calmando tras una emocionante victoria que aseguró su lugar en los playoffs. “Fue una locura,” dijo el quarterback.
El partido fue una batalla entre equipos de 11-3 y significó mucho para el liderato en la NFC Oeste. Los Seahawks iban perdiendo por 16 puntos en el cuarto cuarto después de dos intercepciones de Darnold, dejando a los Rams a un paso de barrer la serie de la temporada y prácticamente eliminar cualquier posibilidad de que Seattle ganara la división. Sin embargo, Darnold y los Seahawks remontaron, anotando dos touchdowns para forzar el tiempo extra, donde consiguieron uno más para ganar 38-37.
La victoria les da a los Seahawks una ventaja de un juego en la NFC Oeste con dos partidos por jugarse y los pone en una posición privilegiada para obtener el primer sembrado de la conferencia. A pesar de un mal día de su defensa, que permitió 581 yardas y siete pases de al menos 25 yardas, Darnold comentó sobre el trabajo duro del equipo: “No jugamos nuestro mejor fútbol, pero ganamos. Ese equipo en el vestuario trabajó muy duro para momentos como este”.
El partido casi contó otra historia, considerando el historial de Darnold contra la defensa de los Rams. Lanzó dos intercepciones en tres posesiones que inicialmente llevaron a los Rams a una ventaja de 30-14. Pero entonces, Rashid Shaheed devolvió un despeje para touchdown, comenzando la remontada. Finalmente, Darnold conectó con Eric Saubert para la jugada ganadora de dos puntos en el tiempo extra. “Sam es increíble,” dijo Saubert. “Simplemente sigue adelante, no importa la circunstancia.”
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