El equipo Indiana Fever ha enfrentado varios desafíos debido a la ausencia de Caitlin Clark, la estrella del equipo y Novata del Año 2024. Clark, conocida por no perderse un solo partido desde la escuela secundaria hasta su temporada debut en la WNBA, sufrió una distensión en el cuádriceps izquierdo que la dejó fuera en el inicio de 2025. Después de regresar y destacar con 32 puntos contra las campeonas defensoras, New York Liberty, una nueva lesión en la ingle la dejó nuevamente fuera por varios encuentros. Desde entonces, ha estado fuera más juegos debido a lesiones en ambas ingles.
A pesar de perder a su jugadora clave durante 19 de los 32 partidos posibles, el equipo ha logrado mantenerse competitivo. Han sorprendido al mantenerse en la batalla por los playoffs y ganar la Copa de la Comisionada sin Clark. Con un récord de 18-14 hasta ahora, el equipo ha superado las expectativas, especialmente considerando las lesiones de otras jugadoras clave como Aari McDonald y Sydney Colson.
Parte del éxito de las Fever se debe a un calendario relativamente favorable en la ausencia de Clark y una mejora significativa en la defensa. El equipo ha mostrado la mejoría defensiva más destacada de la WNBA desde 2024. Esta transformación se debe en parte a la llegada de la entrenadora Stephanie White, quien previamente lideró al Connecticut Sun en defensa, y las contribuciones de jugadoras como Natasha Howard y Sophie Cunningham, quienes han mantenido el rendimiento sin Clark.
Para suplir la falta de Clark, el equipo ha distribuido la responsabilidad ofensiva entre varias jugadoras. Aunque el promedio general de rendimiento del equipo ha disminuido un poco, el liderazgo de Kelsey Mitchell y un alza en el rendimiento de Cunningham han sido cruciales. A pesar de la capacidad del equipo para sobrevivir sin Clark, su regreso será vital para maximizar sus oportunidades en los playoffs, ya que su presencia hace una diferencia significativa en su nivel de competencia.
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