Las clasificaciones de poder después de la Semana 2 muestran que aún es temprano para sacar conclusiones definitivas sobre los equipos, aunque han surgido algunas preocupaciones para los contendientes. LSU, Penn State y Georgia enfrentaron dificultades para destacarse ante rivales inferiores. Clemson tuvo que remontar un déficit contra Troy y Arizona State sufrió una derrota debido a un error defensivo al final contra Mississippi State. Mientras tanto, el plan del mariscal de campo de Michigan, Bryce Underwood, de sorprender al mundo fue frustrado por la defensa de Oklahoma.
Ohio State se mantiene en el primer lugar tras vencer al equipo número uno del país y aplastar a Grambling 70-0. Sin embargo, la capacidad de correr el balón sigue siendo una pregunta, después de solo lograr 77 yardas en 34 intentos contra Texas. LSU, clasificado tercero, ganó 23-7 contra Louisiana Tech, pero su ofensiva necesita mejorar antes de enfrentar a un Florida frustrado la próxima semana. Penn State dominó a Florida International en una victoria 34-0, pero debe mejorar en convertir jugadas de tercer down antes de enfrentar a Oregon.
El equipo de Oregon aplastó a Oklahoma State 69-3, lo que refuerza su perfil de contendientes para los playoffs. Miami derrotó fácilmente a Bethune-Cookman 45-3, con Carson Beck completando 15 pases consecutivos. Sin embargo, debe trabajar en su juego terrestre, como se observó en su apertura de temporada contra Notre Dame. Georgia también tuvo una victoria 28-6 sobre Austin Peay, pero su ofensiva necesita ajustes antes de enfrentar a Tennessee.
Texas mostró destellos con Arch Manning lanzando cuatro touchdown en cinco minutos durante su victoria sobre San José State. Sin embargo, necesitan trabajar en las penalizaciones y en solidificar su juego terrestre. Otros equipos como Notre Dame, Alabama, y South Florida siguen esculpiendo sus caminos después de diferentes niveles de éxito en sus recientes encuentros. South Florida impresionó con victorias sobre Alabama y Florida, posicionándose como un equipo a observar en la búsqueda de un puesto en los Playoffs de College Football.
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