La temporada del portal de transferencias en el fútbol universitario está por iniciar, y se promete que será una edición rápida e intensa. El portal se abrirá el 2 de enero, justo después de los cuartos de final de los College Football Playoffs, dando inicio a un período frenético de dos semanas de transacciones en los niveles FBS y FCS. Este año no habrá ventana en la primavera, por lo que los programas tienen una única oportunidad de conseguir a los jugadores correctos para triunfar en 2026.
Este año ha demostrado que una estrategia centrada en el portal puede transformar radicalmente el destino de un programa. Universidades como Indiana, Texas Tech y Ole Miss están compitiendo por el campeonato nacional gracias a las clases de transferencia que han reunido. Además, entramos en una era de reparto de ingresos en el atletismo universitario donde las guerras de ofertas por los mejores talentos pueden superar fácilmente el millón de dólares, garantizando muchas sorpresas en enero.
A pesar de que el portal está oficialmente programado para abrirse en enero, las negociaciones ya están en marcha. Se espera que muchos jugadores hagan compromisos inmediatos apenas se abra el portal. Comparado con la agencia libre en la NBA, los agentes ya están preparando acuerdos, lo que significa que muchas negociaciones ocurren antes de que los jugadores ingresen oficialmente al portal.
El carrusel de entrenadores también tendrá un impacto significativo en el portal de transferencias. Con muchos cambios de entrenadores en las principales conferencias, se espera un efecto dominó masivo. Universidades que han hecho nuevas contrataciones en invierno, como Purdue y West Virginia, ya han incorporado a más de 50 nuevos jugadores del portal, anticipándose a grandes renovaciones de plantilla para 2026. En cuanto al límite de ingresos compartidos, el debate se centra en cómo las universidades planean superar estos límites mientras tratan de mantenerse competitivas.
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