En Ole Miss, la esperanza para la temporada de fútbol recae en el talento de Austin Simmons, especialmente tras dos destacadas actuaciones contra Georgia el año pasado. La primera se vio en un partido de béisbol, donde Simmons, como lanzador zurdo, eliminó a dos bateadores importantes, incluyendo a Charlie Condon. La segunda fue en el campo de fútbol, donde, en relevo del lesionado Jaxon Dart, lideró un impresionante avance de touchdown que empató el juego. Mike Bianco, su entrenador de béisbol, no se sorprendió por su compostura, destacando tanto su destreza física como mental.
Este año, Simmons sale a la luz no sólo como un quarterback prometedor, sino también como alguien con un camino único. Se graduó dos años antes de lo normal y ya ha obtenido un título en estudios multidisciplinarios en Ole Miss. Su padre, Dave, lo entrenó rigurosamente en fútbol y béisbol desde joven, y aunque Simmons se ha alejado del béisbol recientemente, su formación como atleta de élite continúa siendo evidente. Lane Kiffin, el entrenador de Ole Miss, ha mostrado su confianza al evitar buscar otros quarterbacks en el mercado, señalando el potencial excepcional de Simmons.
Simmons está listo para asumir un rol protagónico este año, siguiendo el legado de su familia, donde todos sus hermanos mayores son zurdos como él. Aunque su viaje ha sido más solitario debido a su intensa dedicación al deporte, Simmons encuentra paz en casa y se prepara para el desafío que representa liderar a Ole Miss en la temporada de la SEC. Mientras busca demostrar su valía en el campo, Simmons mantiene la calma y seguridad en su potencial, recordando que un solo drive no define toda su capacidad como quarterback.
Para Ole Miss, la transición de Simmons de un jugador de relevo a titular es crucial, especialmente en una temporada marcada por cambios en el equipo. Aunque muchas posiciones clave están en renovación, la habilidad natural de Simmons para jugar bajo presión y realizar lanzamientos complicados levanta expectativas. Kiffin confía en que, aunque el camino sea desafiante, el talento inherente de Simmons hará que la transición sea exitosa.
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