En una competencia diferente a los 400 estilos, donde McIntosh ganó con casi seis segundos de ventaja sobre la siguiente competidora, esta vez tuvo que luchar hasta los últimos metros para conseguir la victoria. Según reflejaron las 81 centésimas de ventaja sobre la estadounidense Regan Smith, quien, al igual que hace tres años en Tokio, tuvo que conformarse con la medalla de plata tras tocar la pared con un tiempo de 2:03.84 minutos.
El podio fue completado por la china Yufei Zhang, la hasta ahora campeona olímpica, que cayó dos posiciones y se colgó la medalla de bronce con un tiempo de 2:05.09 minutos. Zhang fue la nadadora que lideró la final desde el inicio con una rápida puesta en escena, manteniéndose en primer lugar durante los primeros cien metros, seguida de cerca por Summer McIntosh, que estaba con 16 centésimas de retraso.
Sin embargo, esa ventaja inicial de Zhang no fue suficiente para frenar el acelerón de la canadiense McIntosh, quien afrontó el último largo con una ventaja de 73 centésimas sobre una fatigada Zhang y 80 centésimas sobre la estadounidense Regan Smith. A pesar de los esfuerzos de Smith para alcanzar a la líder, McIntosh no cedió ni un milímetro en su avance.
Finalmente, Summer McIntosh mantuvo su ventaja hasta el final, asegurándose así su segundo oro en los Juegos de París. A pesar de la intensa competencia y de los acercamientos de sus rivales, la joven canadiense se mantuvo imbatible en los metros decisivos del evento.
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