Sergio “Checo” Pérez estuvo a punto de ser despedido de Red Bull Racing, según F1 Insider, pero la intervención de Liberty Media, la propietaria de los derechos comerciales de la Fórmula 1, lo salvó. El piloto mexicano continuará en la escudería austriaca, a pesar de la crisis que ha estado viviendo en el equipo.
La situación de Pérez se complicó tras su desempeño en el Gran Premio de Bélgica, donde terminó en una modesta séptima posición. Se especulaba que Daniel Ricciardo tomaría su lugar, y hasta se informó que la familia Verstappen ya conocía el cambio en el equipo. Sin embargo, Liberty Media intervino, consciente de la importancia del piloto mexicano para la popularidad del deporte en México y Estados Unidos, presionando a Red Bull para que reconsiderara su decisión.
La presencia de Checo es crucial, especialmente para el Gran Premio de México, uno de los eventos más esperados del calendario que atrae a millones de aficionados. Asimismo, su influencia es significativa para otras carreras en Estados Unidos, como el Gran Premio de Estados Unidos y el Gran Premio de Las Vegas. En este contexto, Helmut Marko, asesor de Red Bull Racing, ante la presión de Liberty Media, confirmó la continuidad de Pérez en el equipo.
Ahora, Pérez tendrá la oportunidad de redimirse en las próximas carreras, pero deberá demostrar su capacidad y mejorar su rendimiento para asegurar su lugar a largo plazo con Red Bull. Este caso subraya cómo los intereses comerciales pueden influir significativamente en las decisiones deportivas dentro de la Fórmula 1.
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