Dos días antes de enfrentar su primer partido en un torneo importante como entrenadora de la selección femenina de Estados Unidos, Emma Hayes criticó la idea de la supuesta superioridad americana en el fútbol femenino, calificándola de “irrespetuosa” y obsoleta. Hayes subrayó que aunque tener ambición es positivo, es necesario ajustar las expectativas para estos Juegos Olímpicos de París 2024 debido al crecimiento global del fútbol femenino.
Hayes enfatizó que hablar sobre llegar a las semifinales y finales es irrespetuoso para las demás naciones, especialmente considerando la eliminación temprana de EE.UU. en la Copa del Mundo Femenina contra Suecia en octavos de final. “Creo que el juego ha avanzado hasta el punto en que nada está garantizado”, dijo Hayes. “Hay que ganárselo”. Agregó que no existen más sorpresas en el fútbol femenino y que se debe mostrar respeto por los demás equipos.
Entrando en el torneo como favoritos en muchas casas de apuestas, EE.UU. ocupa el quinto lugar en el ranking de la FIFA, el más bajo en su historia. Equipos como España, campeonas del mundo, y selecciones fuertes como Alemania y Francia son vistos como serios contendientes. Hayes destacó que Zambia, su primer rival, no debe ser subestimado, mencionando a Barbra Banda como una amenaza significativa.
A pesar del enfoque en el ataque estadounidense, que mostró dificultades en la Copa del Mundo pasada, Hayes ha intentado infundir un nuevo espíritu en el equipo desde que asumió en junio. Sophia Smith, quien anotó el único gol en el último amistoso contra México, resaltó el impacto positivo del regreso de Mallory Swanson al equipo. Hayes y Smith coincidieron en que la motivación ahora es mirar hacia adelante y no centrarse en los errores pasados.
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