Después de que los Baltimore Ravens perdieran ante los New England Patriots en la Semana 16, sus posibilidades de ganar la AFC Norte casi se desvanecieron. Necesitaban vencer a los Green Bay Packers, que ya tenían asegurada su participación en los playoffs, y que los Pittsburgh Steelers perdieran contra los Cleveland Browns en la Semana 17. Sorprendentemente, ambos resultados se dieron y ahora Baltimore se enfrentará a Pittsburgh en la Semana 18 por el título de la división. En DraftKings, los Ravens comenzaron como favoritos por 3 puntos para el encuentro.
Antes de la Semana 17, los Steelers tenían probabilidades de -1400 para ganar la división, mientras que los Ravens tenían +800. La mayoría del dinero apostado en DraftKings y BetMGM respaldaba a Baltimore durante la última semana, aunque los Ravens siguen siendo la menor responsabilidad para las casas de apuestas. La temporada ha sido una montaña rusa para Baltimore, que recuperó el favor en las casas de apuestas tras perder el protagonismo temporalmente frente a los Steelers en semanas anteriores.
Los Steelers eran favoritos para ganar la AFC Norte, pero ahora son considerados desfavorecidos en casa contra los Ravens en la Semana 18. A pesar de las preocupaciones por la lesión de Lamar Jackson, las casas de apuestas mantienen a Baltimore como favorito. John Murray, del SuperBook en Las Vegas, comentó que no ven gran diferencia entre Tyler Huntley y la versión lesionada de Jackson, mientras que Joey Feazel de Caesars Sportsbook cree que las apuestas se moverán en favor de los Steelers si Jackson no juega.
Además del partido entre Ravens y Steelers, otro duelo por título divisional es el de Buccaneers contra Panthers para definir el campeón de la NFC Sur. Tampa Bay, aunque no ha cubierto el spread en ocho juegos consecutivos, sigue como favorito para vencer a Carolina. Finalmente, los 49ers enfrentan a Seattle por el título de la NFC Oeste y la primera posición de la conferencia. El interés en las apuestas de la NFL sigue siendo mayor que el de la NBA, demostrando la popularidad del fútbol americano incluso en encuentros menos significativos.
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