Pep Guardiola tenía un mensaje claro para sus jugadores tras la victoria de Manchester City por 3-0 sobre West Ham el sábado, pero la preocupación debería ser para Arsenal y no para el vestuario del Etihad. Guardiola señaló que ciertos elementos del juego “no fueron buenos” y que el equipo “debe mejorar”. Sin embargo, el técnico se mostró relajado, bromeando con un reportero sobre un suéter navideño y riendo sobre su charla en el campo con el defensor Josko Gvardiol, diciendo que era sobre “las playas en Croacia”.
City viene de ganar siete partidos consecutivos sin conceder un solo gol y muestra señales de la forma típica de Guardiola. Su tranquilidad se refleja en el campo, donde los jugadores celebraron un gol de Erling Haaland imitando a Rayan Cherki. Con esta racha, City recuerda su dominio al final de la temporada 2023-24 cuando ganó su cuarto título consecutivo de liga. Arsenal, por su parte, lidera la tabla con una ventaja de dos puntos, pero recordar la historia podría ser inquietante, ya que han sido superados por City en los últimos años.
Guardiola, con 12 títulos en tres países, indicó que su equipo estará en la pelea si siguen sus instrucciones. “Estaremos allí [al final de la temporada]”, afirmó, pero destacó la necesidad de mejorar para vencer a rivales difíciles como Arsenal. En sus seis temporadas victoriosas, City ha perdido sólo ocho juegos entre febrero y el final de la temporada, mostrando un registro impresionante de encontrar forma en el momento adecuado.
Actualmente, Guardiola considera que su equipo está “en transición”, y el viaje de la Liga de Campeones a Madrid es una oportunidad de aprendizaje para jugadores jóvenes como Nico O’Reilly y Matheus Nunes. Mientras tanto, la semifinal de la Carabao Cup contra Newcastle será otro examen. Con más de medio torneo por jugar, Guardiola mantiene la calma, en una posición ideal en la liga, dejando los nervios para su competidor más cercano, Arsenal.
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