Cuando Ole Miss, clasificado como No. 6, se enfrente a Tulane, No. 11, en la primera ronda del College Football Playoff, será bajo la dirección del nuevo entrenador Pete Golding. Este, ex coordinador defensivo, ha asumido el liderazgo tras la abrupta salida de Lane Kiffin, quien se fue a LSU. A pesar de los cambios, Golding mantiene su propio estilo y ha enfatizado que su enfoque está en el equipo y no en su predecesor.
Golding ha convencido a su equipo de que la postemporada no se trata de él ni de Kiffin. Algunos de los asistentes de Kiffin han regresado temporalmente a Ole Miss para ayudar en el CFP, aunque se unirán a LSU la próxima temporada. Golding comparó la situación con una ruptura amorosa, señalando que las relaciones, incluso profesionales, pueden ser complicadas.
A pesar de las distracciones, Golding y su equipo están centrados en el objetivo del CFP. La partida de Kiffin fue tumultuosa, incluso llevándose a algunos entrenadores clave. Sin embargo, Ole Miss ha conseguido mantener algunos miembros importantes de su staff, y está decidido a aprovechar su oportunidad histórica de juego en el CFP, un hecho sin precedentes en el estado de Mississippi.
El partido contra Tulane no será fácil, pero el equipo está preparado para el desafío. Con Golding liderando desde la línea lateral por primera vez, su enfoque está en asegurar que todos estén listos para competir. El juego promete ser un evento memorable y lleno de presión mientras buscan avanzar en el torneo.
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