El draft de la NFL de 2026 está generando mucha expectación debido a los talentos emergentes de los equipos clasificados para los playoffs del fútbol universitario. El Indiana Hoosiers, liderado por el mariscal de campo Fernando Mendoza, es el único equipo invicto. Mendoza, que ha mostrado habilidades comparables a las de Jared Goff, es el principal candidato para ser la primera selección gracias a su inteligencia y habilidades en el campo. En el segundo turno del draft, se destacan Carter Smith y Omar Cooper Jr., quienes han tenido un desempeño notable esta temporada.
Los Buckeyes de Ohio State también presentan un grupo fuerte para el draft, encabezado por defensores como Arvell Reese y Caleb Downs, quienes son considerados talentos de primera ronda. En la profundización de su ofensiva, Carnell Tate se destaca como el mejor receptor de su clase por su exactitud en los recorridos y su fiabilidad. Kenyatta Jackson Jr. y Austin Siereveld sobresalen en el segundo turno con un impacto potencialmente inmediato en sus futuras carreras profesionales.
El equipo de los Bulldogs de Georgia ofrece menos primeros candidatos, pero están encabezados por CJ Allen y Monroe Freeling, quienes podrían impulsar su posición con sólidas actuaciones. Zachariah Branch ha brillado con su capacidad elusiva y su papel en el equipo. De igual manera, los Raiders de Texas Tech han encontrado en David Bailey un potencial entre los diez primeros, destacando por su agilidad como cazamariscales.
Finalmente, el foco también está en jugadores como Ty Simpson de Alabama y Rueben Bain Jr. de Miami. Simpson ha aumentado su reconocimiento con su serenidad y habilidades de decisión rápida. Mientras tanto, Bain destaca por su velocidad y potencia mostradas a lo largo de la temporada. Con varios prospectos destacados, esta etapa previa al draft promete intensas evaluaciones y expectativas altas para el talento emergente del fútbol universitario.
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