En un domingo típico, el bar de Laverty en el condado de Down, Irlanda del Norte, estaría vacío a las 7 p.m., pero este fin de semana fue diferente. Charlie Smyth, un héroe local, debutaba en la NFL con los New Orleans Saints contra los Dolphins. El dueño del bar, Colin Laverty, contrató a cuatro empleados adicionales para manejar a los 90 asistentes que llegaron para ver el partido y prometió una pinta gratis cada vez que Smyth anotara. Con cuidado comenzaron a planificar esta fiesta de observación cuando se anunció el debut de Charlie.
Leo Smyth, padre de Charlie, oyó la buena noticia de su hijo el viernes, antes de lo esperado. Después de recibir la llamada, se detuvo emocionado cerca de St. Mary’s, la capilla del condado, y rompió a llorar. Esa noche, la familia de Charlie, incluyendo a sus padres, hermanas y su entrenador Tadgh Leader, compraron boletos a Miami, enfrentando demoras debido a la nieve, pero llegaron justo a tiempo.
Durante el partido, después de varios momentos tensos y oportunidades fallidas, finalmente, Charlie pudo mostrar su talento con un intento de campo de 56 yardas bajo la lluvia, marcando el inicio de su carrera en la NFL. Su éxito fue celebrado con entusiasmo en el bar de Laverty, donde todos recibieron una ronda de Guinness. Laverty recuerda cuando entrenaba a Smyth en fútbol gaélico, siempre admirando su talento para patear.
Charlie comenzó su viaje hacia la NFL en 2023 enviando correos electrónicos a la liga. Aunque nadie respondió, su persistencia lo llevó al Programa Internacional de Jugadores, donde impresionó con sus habilidades. Los Saints vieron su potencial desde el principio y aunque al principio luchó con la consistencia, el trabajo arduo lo preparó para su esperado debut. Este evento especial no solo marcó el comienzo de su prometedora carrera, sino que también unió aún más a la comunidad de Mayobridge en torno a su logro. El final del partido trajo victorias pequeñas y grandes para Charlie y su comunidad que lo apoya incondicionalmente.
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